lunes, 24 de febrero de 2020

Todos podemos ayudar a prevenir. A las drogas, DI NO MÁS


La dependencia a las  sustancias psicoactivas                        ( drogas) transforma la vida en un infierno

La persona con esta enfermedad se ve atrapada en un círculo vicioso. No puede dejar de consumir. Se aísla. Su entorno social y afectivo se deteriora. Baja su rendimiento en el trabajo y en el estudio. Todo pierde sentido. Su único interés es volver a consumir. Otra dosis. Más consumo. Otra droga. Más droga. Nunca es suficiente. Siempre se quiere más. Conseguir la droga y consumirla empieza a ser lo más importante de su vida.

Las personas abren la puerta de este infierno sin darse cuenta
Y ese infierno tiene un nombre: DEPENDENCIA


No permitas que tus hijos  e hijas caigan en esto, Acompañalos, Orientalos, Escuchalos, esto es una realidad que no se encuentra lejos de nuestro contexto.
Debemos estar Alerta, ser Ejemplo, Tener Normas y Reglas claras en el hogar.


En el colegio estamos para Ayudarte, No dudes en buscarnos


DATOS DE INTERÉS 

Dani  a sus  16 años  asiste a muchas  rumbas a las que va junto con jóvenes de su misma edad, abunda el licor, el cigarrillo, drogas como el Poper o Tucibí
Las rumbas puede ser en discotecas de adultos en donde violando la ley dejan entrar menores de edad. Pero la mayoría de las fiestas las hacen en salones comunales.
"Dani" dice que mucho padres saben los sitios donde sus hijos asisten para las rumbas, pero desconocen totalmente qué realizan al interior de las fiestas.
















“Felipe” es un joven que frecuenta lugares de rumba en el sector de Chapinero, tiene 16 años e ingresó al establecimiento con una contraseña falsa, estas según nos comentó, pueden costar alrededor de 40.000 a 50.000 pesos.
La música que más escuchan cuando salen de rumba es el reggaeton y la electrónica, el protagonista de la noche es el aguardiente.
Felipe” acepta que en las fiestas hay consumo de drogas, pero estas las consiguen a las afueras de los establecimientos, las más comunes son: el popper, los ácidos, el perico y derivados del éxtasis.


   


En la Avenida Primero de Mayo, una menor de 17 años frecuenta una discoteca y para ingresar lo hace con la cédula que le prestó una amiga, contó que tenía el permiso de su mamápero no del papá.
La promiscuidad es evidente. Las chicas suelen besarse con más de un joven durante las fiestas. El baile de las rumbas también contribuye. Ahora la música promueve los bailes sensuales que los hombres aprovechan para tocar a la niñas sin que ellas opongan resistencia.




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